8 de mayo de 2014

[Actualizada] Las esculturas del Canal.

Hace unos años el barrio de Torrero amaneció con unos nuevos vecinos que encontraron en el Canal Imperial de Aragón su hogar, y no me estoy refiriendo a los patos y demás aves que reinan en la magna obra de Pignatelli, si no a unas curiosas esculturas que aparecieron "de la nada".

Lo curioso de estas esculturas es que no formaban parte de ninguna actuación llevada a cabo por el Ayuntamiento de Zaragoza o por alguna asociación cultural o vecinal, a día de hoy se sigue sin tener muy claro quien o quienes fueron los autores de estas obras que generaron también muchísimas quejas.
En su día hubo quienes las consideraron una forma de arte totalmente legítima a pesar de su espontaneidad y ubicación, pero muchos otros vieron en estas obras un acto de vandalismo.


Las esculturas fueron instaladas a base de soldadura en distintos puentes que cruzan el Canal y en algunos bloques de cemento que señalizan la ruta del Canal Imperial dentro del Anillo Verde de Zaragoza. La selección de algunas de estas ubicaciones puede que no fuesen las más acertadas, pero considero exagerado que algunas de ellas llegasen a considerarse un riesgo para ciclistas y viandantes. Que si sobresale mucho y la gente se puede golpear, que si esa otra está demasiado cerca del carril bici... sea como sea, ya no queda casi nada de aquella espontánea explosión artística. Sí, como supondréis yo las consideraba obras de arte.
Observando.
De todas las esculturas que se instalaron en su día tan sólo queda la que está situada en uno de los puentes y que representa una silueta humana que mira en dirección al Puente de América. Triste y solitaria parece mirar al horizonte anhelando el tiempo en que compartía su casa con sus hermanos y hermanas de metal.

Pero no todo van a ser malas noticias. En uno de mis habituales paseos por el Canal descubrí una nueva especie de ave que no se encuentra en los libros de biología, un gran pájaro descendiente de aquellas desaparecidas esculturas que tal vez un día emprenda el vuelo para ayudar a encontrar a sus antepasados de metal.
Una nueva especie de ave.
Arte o vandalismo, ¿qué pensáis vosotros? Porque yo lo tengo clarísimo.


(Actualización 7 de Julio de 2014)


Cual ha sido mi sorpresa en el día de hoy al encontrarme con unos nuevos habitantes en las recientemente instaladas pasarelas que cruzan el Canal y que unen los barrios de San José-Miraflores y Torrero-La Paz.

Su acabado es mucho más sencillo que en el resto de esculturas que podemos encontrarnos a lo largo del Canal Imperial o incluso de las desaparecidas que ya no podemos disfrutar. Pero no importa ya que siempre son de agradecer este tipo de actuaciones.

Otra diferencia de estas esculturas con las que ya habíamos podido disfrutar hasta ahora es que podemos conocer su autoría, si no de su creador de quien ha donado la escultura. ¿Quiere decir esto que en esta ocasión hay un respaldo público detrás de esta actuación artística? No lo puedo ni confirmar ni desmentir, no he encontrado ninguna información relativa a estos nuevos vecinos del Canal.
Ramificaciones.El fantasma asustado.
Yo por si acaso os recomendaría que os acercaseis a dar una vuelta por la zona y poder disfrutar de ellas, no vaya a ser que también terminen desapareciendo.


Fuente de las imagenes: propia (sergioski1982).
Fuente del texto: propia.

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